jueves, 19 de enero de 2012

Motorizados amenazan con protesta masiva si se aplica decreto presidencial

Desde que en el país se cambió el chip de que la moto era un vehículo de paseo y para realizar diligencias de manera más rápida, la vida del caraqueño empeoró. La motocicleta comenzó a tomarse como un negocio de transporte y el número creció  exponencialmente, producto de la falta de empleo y formas para ganarse la vida.

Si bien muchas personas apelaron a una moto para librarse de las terribles colas en las autopistas capitalinas, ahora el asunto se ha convertido en un problema que el Gobierno Nacional no ha logrado controlar.

Años después de que el mal está hecho, el Estado decidió hacerle frente a la anarquía motorizada. El pasado 4 de octubre de 2011 se publicó el Gaceta Oficial número 39.771 el Decreto Presidencial Nº 8.495, el cual dicta el Reglamento Parcial de la Ley de Transporte Terrestre sobre el Uso y Circulación de Motocicletas en la Red Vial Nacional y el Transporte Público de Personas en la Modalidad Individual Moto Taxis.

El decreto fue firmado por el Presidente Chávez el sábado 1 de octubre de 2011, durante una reunión del Consejo de Ministros, en el Palacio de Miraflores, con la finalidad de atender las rogativas que diariamente hacen millones de venezolanos para que se regule el andar de los motorizados. El decreto debió entrar en vigencia luego de la aparición en Gaceta.

El deber ser



El nuevo reglamento, en su artículo 28, especifica algunas normas para la circulación de las motos, entre las cuales resaltan que los motorizados deben ceder el paso a los peatones, no adelantar vehículos que se hayan detenido para dar paso a los transeúntes, no transitar por las aceras ni en contra vía y solo viajar por el hombrillo en autopistas.

Asimismo, prohíbe a los motorizados circular entre canales, paralelamente a otro vehículo en movimiento en el mismo canal de tránsito. También restringe el desplazarse “cambiando frecuentemente de canal o pasando continuamente al centro, a la izquierda o la derecha de la vía”. El decreto veta el hecho de circular sin el casco de seguridad integral o que el pasajero viaje sin ese accesorio de protección. Adicionalmente, priva a los motorizados de transportar más de dos personas en sus vehículos, incluyendo al conductor o conductora.
Otras de las restricciones del decreto presidencial es “transportar niños o niñas menores de 10 años, mujeres embarazadas y adultos mayores de 60 años”, así como equipaje que dificulte hacer maniobras con la moto o que exceda de 15 kilogramos.

Ignoran la realidad

Lo más grave del asunto es que los motorizados desconocen el alcance del decreto presidencial. Consideran que a pesar de que ya está publicado en Gaceta Oficial como una ley que debe cumplirse, aún no está aprobado.

“Eso no va a aprobarse, por más que esté en Gaceta Oficial. Ya nosotros hablamos con el vicepresidente Elías Jaua y no vamos a acatar esa medida. Lo que pasa es que a ustedes los medios les gusta especular”, dijo un mototaxista de la Cooperativa La California Norte que se negó a dar su nombre.

Uno de los mototaxistas expresó “yo estoy de acuerdo con la medida de que no puedan montarse niños, porque es un peligro. Por lo menos yo le pago transporte a mi hijo para el colegio y evito subirlo a la moto”. Pero el motorizado Edwin, inscrito en la Cooperativa Cruz Verde, en la avenida Lecuna, opina distinto. No simpatiza con tal medida alegando que “yo tengo a mi chamo de 6 años y en mi moto lo llevo para la escuela, no tengo para pagarle un transporte, cómo hago”, se preguntó.

Alertó que si la medida se lleva a cabo “las fuerzas (el Gobierno) saben lo que vamos a hacer. Ya hemos convocado a los más de 12 mil motorizados de nuestro sindicato y vamos a trancar autopistas, calles, todo lo que sea necesario para que se eche para atrás ese decreto”, aseguró Edwin.

“A este país se lo va a llevar
la droga y la delincuencia”

William Campos, presidente de la línea Moto Servicio Mata de Caucho La Hoyada e integrante de la Asociación Bolivariana de Motorizados, señaló que “en vez de perseguir a los motorizados que trabajamos porque no persiguen a los malandros. Deben ponerle parámetros a la delincuencia que desde los barrios está dañando a los niños. Este medida sinceramente no hace falta”, sostuvo. Comparó el caso de los motorizados con el de los comerciantes informales. “Es como con los buhoneros, les dieron tantas facilidades y ahora le dan palo para sacarlos de los sitios donde los ubicaron, no es posible”.
Campos recalcó que de aprobarse “la ley del librito ese de Transporte Terrestre que anda corriendo por ahí habrá una protesta enorme; a la que yo me uniría porque no estoy de acuerdo”.

Instó al Presidente a ocuparse de los problemas que según él verdaderamente azotan a Venezuela. “A este país se lo va a llevar la droga y la delincuencia”, concluyó.

Autoridades a la espera

Distintos funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana, encargados de velar por el tránsito y la vialidad en Caracas, informaron que hasta ahora no han recibido órdenes superiores de comenzar a regular y meter en cintura a los motorizados, para que acaten las mencionadas medidas.

Entretanto, Celia Herrera, presidenta de la Sociedad Venezolana de Transporte y Vialidad, hizo un llamado al Gobierno a que ponga en disposición a todos sus funcionarios  porque “se necesitará la estricta supervisión, y control de las autoridades de tránsito para que se acate la medida”.

"La labor de lo funcionarios ahora no estará fácil, ellos no están armados y permanecen expuestos a la agresión" indicó Herrera.

La experta en transporte recalcó que los 5.000 efectivos del cuerpo técnico de vigilancia contabilizados para el 2007 en la capital (luego no hay números oficiales de la cantidad de funcionarios) son " insuficientes para asegurar el cumplimiento de las nuevas normas".


Yolmar E. Bruzual P. 

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